Tantas veces había postergado mi visita a Machu Picchu hasta que por cosas del trabajo pasé por Cusco y no pude regresar a Trujillo sin visitar estas complejas y mágicas ruinas. Sí, toda una experiencia pasar por estos pasadizos de piedra y el intento por escuchar el eco del silencio en medio del ruido de tanto visitante.
Fuera de todo mi descontento por el servicio del tren y el trato tan desatento a los viajeros locales... fue maravilloso pisar el mismo lugar por donde nuestros antepasados hicieron maravillas, y es que nuestro Perú está lleno de estos pasajes en todo su territorio pero Machu Picchu es lo más promocionado y lo más añorado por el visitante. Me hablaron mucho de la mística que se respira, la magia, la historia y tanta cosa que tal vez lo sea para algunos pero en mi caso solo sentí admiración por semejante concepción para aquellos tiempos.
Lo malo de viajar sola es que casi no salgo en las fotos XD y cuando pedia que me fotografiaran me sacaban por pedacitos o demasiado lejos... nunca faltan las anécdotas. Comparto algunas vistas de mi inolvidable Machu Picchu recomendándoles visitarlo, no les recomiendo viajar en épocas de viaje de promociones de los colegios porque te dejan si cupo en los buses de retorno, la experiencia enseña.
3 comentarios:
Increíble!
Es uno de los sitios que tengo que visitar, sin ninguna duda!
Hay tanta gente cómo dicen?
he oído que si giras la primera fotografía 90 grados (hacia la izquierda) se ve el perfil de un hombre (con una nariz muy prominente, por ceirto) ¿Coincidencias? Quién sabe lo que es y lo que uno quiere ver, no?
Saludos!
En realidad es un lugar mágico, indescriptible sensación de paz.
Ah, me has hecho recordar el viaje en tren, un calvario... tuvimos que tomar un taxi para regresar a Cusco, el conductor, realmente un maníatico, con tantos precicpicios... :)
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